Aunque pareciera que en la actualidad solo existe lo digital e Internet, la publicidad tradicional ofrece muchas ventajas, y mas si la combinamos con la publicidad tradicional.
¿Se puede promocionar aún con la publicidad tradicional?
Ante el auge masivo del Internet y la gran influencia de las redes sociales, ha surgido una comparación inevitable entre la publicidad online y la publicidad tradicional. Y en vista de la gravitación de estos medios tan poderosos, muchos se preguntan, ¿es válido el uso de la publicidad tradicional? ¿O estamos ante algo obsoleto destinado a desaparecer?
En realidad, una cosa no desplaza a la otra. La red ha proporcionado la increíble posibilidad de ampliar las fronteras, pero eso no le quita lugar a la publicidad tradicional cuyo poder de predominio sigue arraigado para dar a conocer un producto o actividad.
La publicidad en realidad es solo una. La diferencia radica en el medio mediante la cual se desarrollará. La finalidad es dar a conocer, con el fin de posibilitar la venta.
Las ventajas de la publicidad tradicional
Los medios de comunicación más tradicionales, tienen un gran nivel de difusión en cualquier parte del mundo. Siguen siendo el medio de referencia más popular, a través del cual se lleva información a toda clase de personas.
Siempre deriva en un contacto cara a cara con el cliente, y esto es una cualidad muy valorada. Las personas quieren ser tratadas por otras personas, sin que medie la frialdad virtual.
Además, llega a una gran cantidad de personas que no usan los medios virtuales, y que incluso pudiendo hacerlo sienten rechazo por la sistematización. Estas personas quieren saber de productos de la forma tradicional.
Por esto mismo quieren acceder a los productos personalmente y ver como son. De este modo se forja una credibilidad única, para ampliar una relación comercial o de negocios.
De este modo podrá comprobar que el producto es tal como se lo describe, ya que en un mundo virtual, la persona no lo ve, hasta que lo recibe en su hogar.
El uso de ambos frentes
Para tener éxito y hacer conocer todos los productos o la actividad de un negocio, es válido y útil emplear tanto el frente de la publicidad digital como el de la publicidad tradicional. Una no le quita el lugar a la otra.
La publicidad tradicional puede tener llamados de atención para que el público ingrese al mundo oline, visitando el sitio web correspondiente. La presencia en las redes sociales también tiene un enorme poder para dar a conocer cualquier actividad.
Ya en el Internet, diversos mecanismos como las estructuras SEO, pueden también atraer tráfico al sitio. Pero cuando este requiere la presencia en un lugar físico para mostrar el producto, estos medios sirven para motivar a las personas a asistir al comercio real.
Allí, el contacto personal, la atención detallada al público cumplen papeles más que importantes, si no es que vitales. Las personas quieren tratar con otros seres humanos que los escuchen y satisfagan sus necesidades con amabilidad. En esto, la gente de carne y hueso sigue siendo el ingrediente fundamental.
Es así como la publicidad tradicional sigue teniendo cabida en el comercio actual, y no tiene por qué competir con la promoción digital. Ambas siguen siendo herramientas válidas en el mundo actual.