Un aspecto poco valorado de la vida profesional, es la capacidad de dar clases o dictar conferencias, como un aspecto más de tu carrera. Si se te ha presentado esta oportunidad posiblemente debas considerarla.
3 Cosas que necesitas saber para dar clases
El impartir clases o asistir a conferencias, es una oferta que reciben profesionales y personalidades destacadas, y te brindará un marco nuevo de experiencias a tus conocimientos.
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Si se te ha abierto esta puerta, es porque eres alguien muy bueno en lo que haces. Pero, a pesar de ser una buena oportunidad laboral, muchos la rechazan, debido a no tener en claro cómo hablar en público o por falta de una formación docente.
Sin embargo, con algunas planificaciones sencillas, más de un profesional se ha convertido en un buen maestro. Después de todo, es una tarea que requiere cierto orden y una disposición natural a la comunicación.
1-Planificación y objetivos
Pensemos por un segundo que necesitas realizar una charla en el auditorio de tu universidad. Es una excelente manera de empezar, puesto que debes desarrollar un tema durante una cantidad limitada de tiempo.
Entonces, lo primero que debes hacer es establecer el tema del que hablarás, en el caso que no te hayan solicitado uno determinado. Cuando esto esté bien fundado, debes decidir cuáles son los objetivos que deseas establecer. Estos son los puntos que deben estar claros, para cuando hayas terminado tu exposición.
Ten en cuenta que la atención de todo ser humano no dura más de 50 minutos. Y ya sea que hables esta cantidad de tiempo o más, no puedes ser tú solo hablando todo el tiempo. Debes tener una estructura, y recurrir a formas dinámicas de desarrollo del tema. Siempre es muy importante una correcta planificación.
2-Creación de la ponencia
Piensa que debes establecer claramente una introducción, un desarrollo y un cierra de la charla. Actualmente se ponen a disposición de las conferencias materiales audiovisuales como proyectores de multimedia. Estos son dispositivos que proyectarán en una pared diversos materiales como imágenes, esquema y videos, desde una computadora personal.
Aquí es cuando puedes recurrir a crear una proyección de diapositivas con Power Point. Si conoces este programa popular de Microsoft Office, es tu oportunidad de diagramar una presentación con imágenes, textos dinámicos e videos o música.
Con sencillez, podrás desarrollar los objetivos de la conferencia, hablando en desde un podio, mientras que a un lado el público verá el material que tú mismo mostrarás de tu laptop o netbook.
3-Claridad, sencillez y humor
En el desarrollo de tu charla, todo concepto que enuncies debes expresarlo con claridad, sin explayarte con palabras demasiado complicadas. Así estés en la más rancia de las instituciones académicas, el arte de la docencia radica en que hagas lo difícil, comprensible y ameno.
Si partes de un tema abstracto y rebuscado, haz todo de tu parte para que se exprese con sencillez. Este es otro factor que mantendrá el interés de tu audiencia en todo momento.
Una manera es explicarlo mediante anécdotas que hayas vivido o chistes que vengan al caso. El humor, si te sale naturalmente en cualquier momento, es otra herramienta muy valiosa.
En definitiva, debes desarrollar un qué, cómo, cuándo, dónde y por qué, que le dé a tu charla el marco de claridad necesario.
Cuando termines, abre un espacio de preguntas y respuestas. Esto es tradicional en conferencias universitarias, y es tu oportunidad de ampliar lo que hayas expresado. Serán unos minutos más que valdrán la pena para cerrar esta experiencia.
Esta es posiblemente la forma más práctica de llevar adelante una conferencia. Pero recuerda que la planificación y los objetivos, son fases que también se aplican en el caso que debas dictar clases con regularidad.